jueves, 3 de marzo de 2016

Anotaciones y Breve recesión en referencia a La Vanguardia Dossier. Marzo 2016
.Breves referencias a diversos artículos publicados en el dossier mencionado.
.”En varios  países importantes, la democracia, no solo sobrevivió sino que se hizo más fuerte durante los años 2000.En Brasil , que  sufrió  graves problemas  de gobernabilidad en los años 80  y principios de los 90, la estabilidad  y cualidad  de la democracia mejoraron  notablemente en los años 2000; en India, mayores índices de participación, sobre todo entre los ciudadanos más pobres y de castas inferiores, han creado  una democracia crecientemente incluyente; en Chile, una reforma constitucional  de 2005  eliminó todos los enclaves  autoritarios que quedaban  y estableció el pleno control civil sobre las fuerzas armadas; en Croacia, Ghana, México Taiwán, partidos gobernantes  anteriormente autoritarios volvieron  al poder  y gobernaron de forma democrática, un paso esencial hacia la consolidación. Y en Colombia y Polonia , instituciones democráticas frenaron  de hecho las ambiciones de presidentes de inclinación autocrática(Alvaro Uribe en Colombia,Lech Kaczynski en Polonia).Fueron importantes éxitos democráticos, muchos de los cuales tuvieron lugar en países  grandes e influyentes. Sin embargo, recibieron mucha menor atención que los retrocesos democráticos registrados en Tailandia y Venezuela y la falta de democratización en China”.
“La política contemporánea en Occidente puede ser de confrontación pero no es intrínseco a la democracia. Los países no occidentales pueden combinar un estilo de políticas menos agresivos con instituciones democráticas y con las garantías liberales.”
Nuevas Ideas.
La democracia moderna ha sido  condicionada por aspectos de la historia  occidental que reflejan ciertos tiempos históricos. De la misma manera, el futuro de la democracia va a estar diseñado por las nuevas pautas del poder  y las tendencias políticas que se están creando fuera de Occidente. En este sentido, las variaciones democráticas deben construirse a partir de la democracia liberal en lugar contra ella.El mundo necesita experimentar  para encontrar formas locales que otorguen más vitalidad a las ideas  de tolerancia , participación y rendición de cuentas.No significa simplemente  más liberalismo  occidental.Por el contrario , implica que las ideas  de los otros deben  ser tomadas  seriamente como un camino que segure el respeto del espíritu del liberalismo político.La forma en la que los derechos liberales están diseñados  debe tener en cuenta los ideales comunitarios  y no sólo  la protección  de los individuos.Las sociedades no occidentales  son más proclives a pensar  que los derechos están relacionados  con las habilidades  del individuo  de ayudar a los objetivos de la comunidad  en lugar  de considerarlos como instrumentos para que los individuos se protegan del Estado.El liberalismo  es percibido como un instrumento  para atacar  las tradiciones , las religiones y la comunidad.Es necesario  demostrar  que esto no es así, y que las normas democráticas  no están atadas a una agenda moral y social.Es importante mostrar que se puede establecer una relación saludable y fortalecedora entre derechos personales y religión, especialmente en los países musulmanes.
.Se necesita también otorgar poder de decisión económica a un número más grande de actores sociales. Es necesario un espíritu más abierto y más participativo para que las opciones de política económica sean objetos de debates democráticos y adquieran legitimidad.Durante las últimas dos décadas en muchos países  las instituciones  económicas han sido apartadas  del espacio  de debate  político para despolitizar las políticas de libre mercado.Esta tendencia debe ser reexaminada.Resulta  necesario determinar niveles de participación para asegurar que las minorías sean tenidas en cuenta para llegar  a consensos y que un amplio espectro de grupos sociales  sea consultado.Debe existir tolerancia entre las comunidades.Estos niveles de participación tienen que asegurar la democracia en cada comunidad  para evitar que las élites  no democráticas compartan el poder  sólo entre ellas.Estas perspectivas son necesarias en estados como Ucrania, Siria o Iraq.Finalmente, es necesario buscar formas alternativas de activismo y representación que vayan más allá del estilo  occidental basado en partidos y parlamentos. Muchos sugieren que la tecnología, liderada por la revolución de internet, es la que más va a lograr en la promoción de distintos modelos de democracia. Esto ya puede verse en la manera en la que grupos locales basados en identidades tradicionales están controlando-por canales distintos a los de la democracia liberal-cómo usan su poder los gobiernos.
El desafío para la democracia global.
.En los próximos años las variaciones de las formas  democráticas probablemente se incrementarán  y hasta puede ser que ayuden a desbancar las formas autoritarias. Pero estas variantes  tienen que ser  concebidas correctamente. De lo contrario  pueden conducir al liberalismo , a la intolerancia. La  estructura  del nuevo orden mundial está por definirse. Cuando las potencias emergentes están desafiando las reglas liberales, la democracia debe demostrar su capacidad de adaptación y de incorporación de ideas no occidentales. La comunidad internacional-específicamente las organizaciones que trabajan para promover y defender  la democracia en el mundo- deben mirar seriamente a las ideas no occidentales para dar más significado a los pilares del liberalismo político como tolerancia, pluralismo y rendición de cuentas. Estas variaciones pueden significar que algunas sociedades no occidentales tomen decisiones que las sociedades occidentales rechacen; otras variaciones puede ser que busquen mejorar, desde el punto de vista occidental y no occidental ,las prácticas democráticas. Apoyar estas diferencias  significa mejorar la calidad de la democracia.
Los movimientos sociales.
.Los movimientos sociales son, a lo largo de la historia, los agentes fundamentales de la transformación social. Y esto es así porque se oponen a los valores establecidos en las instituciones de la sociedad  y reproducidos en el funcionamiento cotidiano de dichas instituciones, mediante la aplicación de las normas que resultan de relaciones de poder, impuestas  o consensuadas, plasmadas en leyes y  procedimientos  administrativos.
Los movimientos sociales se  diferencian de las movilizaciones reivindicativas  en que se sitúan fuera de la institucionalidad si esta no responde  a sus valores y proyectos. Son movimientos culturales encaminados  a transformar los valores de la sociedad más que a tomar posiciones en la estructura del Estado. No son agentes políticos que buscan el poder del Estado, aunque suelen tener  importantes efectos políticos, tanto institucionales como extrainstitucionales.
Los movimientos sociales surgen generalmente mediante la combinación de tres fuentes de contestación. Por un lado, la crisis de funcionamiento de instituciones y organizaciones  que no cumplen lo prometido. Por ejemplo , tras una crisis económica que golpea el nivel de vida  de la mayoría y cuya gestión  es realizada con un sesgo claro hacia la preservación de los intereses de las capas sociales más ricas y poderosas. De ahí surge  la protesta espontánea, la movilización social, a veces impulsada por los representantes institucionales de los intereses sociales y económicos de los sectores populares. Pero hay un segundo y decisivo elemento en la formación de un movimiento social: la indignación inducida por algún acontecimiento que hace insoportable mantener la sumisión al orden social. Son, en su raíz, movimientos emocionales, que por tanto son reacción a la racionalización de su protesta en los cauces institucionales. Precisamente porque estos cauces se revelan incapaces de procesar su indignación,tanto  en sus causas como en sus efectos. Por ejemplo, la difusión viral de imágenes de brutalidad policial o de corrupción de las élites generan emociones de tal intensidad que superan la emoción sobre la que se funda el orden social: el miedo. En fín,hay un tercer componente que permite la extensión y la maduración de los movimientos sociales, más allá del momento emocional: la emergencia de una conciencia crítica que pasa de la protesta al proyecto. Un intento de llegar a la raíz del problema y proponer otras formas de organización económica-social y en el último término, de la gestión  político-institucional de las sociedades. Este proyecto puede ser más o menos consciente y organizado, pero plantea la vida social desde otros valores, desde otros supuestos de lo que debe ser antes de lo que debe ser.Ahora bien , este momento no debe confundirse con la institucionalización del movimiento en el sistema político. Es, simplemente, la articulación de los valores del movimiento en prácticas y propuestas que intentan plasmar esos valores en formas tangibles………...
Los movimientos sociales  no son unidimensionales, no son únicos, sino que coexisten, se solapan y se contradicen, porque son expresión de la sociedad, por definición contradictoria, más allá de las instituciones superadas por la dinámica de una realidad cambiante.

Todas esas criticas fueron formuladas y difundidas por movimientos sociales, tanto por el 15-M, como por otras organizaciones, incluso por   el independentismo catalán. Son críticas enraizadas en la conciencia colectiva.Y por tanto no son fácilmente negociables ni adaptables a los marcos institucionales. Y su concatenación en el tiempo parece conducir a la tormenta perfecta. Tras la cual tendremos que repensar los caminos de reconstrucción democrática.

No hay comentarios:

Publicar un comentario